Para vivir verdaderamente es necesario renacer, para renacer es imprescindible "morir" y para "morir" es imprescindible DESPERTAR". G.I. Gurdjieff

jueves, 14 de mayo de 2015

CATEDRALES, MASONES Y SIGNOS LAPIDARIOS

 
Para empezar, los masones nunca fueron ateos ni brujos, sino más bien albañiles, constructores, para quienes Dios era el "Gran Arquitecto".
 
A este tema lo puso de moda el libro "El Misterio de las Catedrales", que en 1929 reveló las curiosas relaciones de una logia gremial medieval con las ciencias musulmanas, los conocimientos judíos y las devociones prácticas de los Caballeros Templarios. Mucho antes de fermentar revoluciones en Francia, Estados Unidos y muchos países latinoamericanos, los masones se dedicaban a lo suyo, a construir. Hay quienes sostienen que el creador de la masonería, también fue el constructor del templo de Salomón. Porque no importa la religión, para ellos lo relevante era construir… y después, casi como una consecuencia, tolerar y todo lo que eso implica. ¿Hay que explicar que éste, como todos los artículos de Viajes, no es ni a favor ni en contra de nada, ni de nadie, ni de lo que está arriba, abajo, a la derecha o a la izquierda? No me le busques patas a la sota.
 
Por Alberto Moroy
Seguro que usted habrá leído o escuchado sobre el misterio de las catedrales. Fue el titulo de un famoso libro escrito en 1922 y publicado en París en 1929. "Le Mystère des Catedrales" Hoy vamos a abordar una temática poco conocida que tiene que ver con sus constructores (Canteros, masones, lapidarios y varios mas), los que sin querer dejaron un toque esotérico, con sus sellos de difícil interpretación.
Podríamos decir que eran los arquitectos e ingenieros de hoy, pero recibidos en la facultad de la vida, aunque bastante mas rigurosas que nuestras facultades, con normas de practica y aprendizaje que duraban décadas. Sus obras (Catedrales) fueron y son monumentales, difíciles de "digerir" por su estilo, su magnificencia arquitectónica y la ingeniería de vanguardia empleada en su constucción. En muchos casos que se armaban como un "Rasti" (Juego de piezas plásticas de construcción por encastre), cuyas piezas se tallaban en forma separadas, donde un mismo artesano se dedicaba a tallar solo algunas partes (latomus) y la suma de varios "conformaban un todo"
 
De canteros a la masonería especulativa
Debido a que las transformaciones económicas, la mayor parte de las logias de la "masonería operativa" (mason cantero y muchos mas, eran sinónimos), dejaron poco a poco de ejecutar obras materiales, transformándose en organizaciones fraternales, pero conservando en parte, sus usos y costumbres tradicionales, naciendo asi .la "francmasonería especulativa" en el siglo XVIII (1717) hasta nuestros días.
El conocimiento gremial era algo secreto, por su propio sentido de existencia, sólo pasaba de maestros a aprendices, para evitar que surgiera competencia. En el caso de los constructores, ese conocimiento oculto da un paso más allá y se terminaron creando mitos, querían verse a sí mismos como los receptores de conocimientos trascendentes sobre la construcción física y espiritual en la sociedad. Este esoterismo "real" deriva con el paso de los siglos en la creación de la masonería, del francés maçon, albañil libre. Bajo el influjo actual de la masonería, muchos piensan que las marcas eran ejemplo de la magia masónica
El monasterio de Moreruela (Zamora 1162)
https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=CO03LG5_rKA
Los Maestros constructores, en su búsqueda del conocimiento tuvieron contacto con las aljamas judías, con sabios musulmanes y matemáticos, y con la Orden del Temple, de ahí que al final adoptaran la estrella de seis puntas, y se denominaran, "hijos de Salomón". Su Regla del Secreto, como anteriormente los pitagóricos, es categórica y se recoge en los "Estatutos de Ratisbona, de 1459"
 
El Castillo de Montalbán
Se trata de la fortaleza de mayor tamaño y complejidad de todas las existentes en la actual Castilla La Mancha (Cerca de Toledo) y una de las más importantes de la Península Ibérica Es realmente impresionante encontrar una fortaleza enorme, con sus defensas bien conservadas en medio de la nada. Con sus piedras llenas de marcas de cantería de simbolismo esotérico De allí partieron los caballeros templarios hacia la batalla de las Navas de Tolosa en 1212.
Las Claves del Románico: Castilla "El maestro Miguel"
http://www.youtube.com/feature=player_embedded
Estatutos de Ratisbona, 1498 ¡Súper interesante!
http://www.gle.org/sobre-nosotros/antiguas-constituciones/52-estatutos-de-ratisbona-1498-ev
Signos lapidarios

Algunos símbolos
Todos estos signos de esta tabla pertenecen á las Catedrales de Reims y Estrasburgo, excepto los que van seguidos de las letras T L F M L que son de Toledo, v Salamanca, Freixo, Moncorvo, Lamego y los ocho que siguen al antepenúltimo de la tercera línea inferior son de la Torre de Beja. Esta clasificación nos pone ante la vista todos los sistemas seguidos por los obreros medievales (Revista española año 1873)

Símbolos canteros medievales

https://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=-XotXHX26sM


Clasificación
En el siglo XII ya existe una clasificación de obreros por profesiones; (cementar) los canteros o cortadores de piedra (latomos), y los albañiles o maçons (cementarlos) El latomus, el que da a la piedra su forma; cementarius, el que la coloca y la une a las otras con mortero. La palabra lapicida, designa también al trabajador de piedra, y en algunos documentos aparecen "tailliator petrae" o "caesor lapidum", que es empleado a comienzos del siglo XII. En Inglaterra (Londres (1213), se empleaban las expresiones"lathomus liberarum petrarum" (tallista de piedras francas) y "sculptor lapidum liberorum", según se escogiera la palabra de derivación griega lathomus (picar piedra) o la latina sculpo.

A veces se le llamaba simplemente maestro masón; así, puede leerse en la basílica colegiata de San Isidoro de León, sobre la tumba de Doña Sancha, la firma de un artista, posiblemente francés, cuyo nombre ha desaparecido, que dice: Mestre Mason Me Fist (maestro masón me hizo). La Doña Sancha de la que trata este post es la que fue hija de la Reina Doña Urraca y del Conde Don Raimundo de Borgoña y hermana del Emperador Alfonso VII. Nació en el año 1102. En Alemania también se utilizó el término gubernator (gobernador) o ingeniator (ingeniero), esta última designación era solo empleada para los constructores de castillos.

Tenemos dos categorías de obreros: el masón superior o cantero, que es el que trabaja la piedra, y el inferior o albañil, que no posee la misma formación y está encargado principalmente de colocarla. Y dentro del masón superior o cantero, todavía podemos distinguir entre el "artista" que trabaja la piedra blanca de adorno (para hacer molduras, capiteles estatua. Y el cantero simple que trabaja la piedra dura de sillería.

.http://www.signoslapidarios.org/inicio/catalogo/archivo-de-imagenes

La firma o marca permite constatar la movilidad migratoria de grupos de canteros que trabajan en una misma región. Las piedras, por su parte, llevaban tres clases de marcas: la de la cantera que indicaba para qué parte del edificio iba destinada. La del cantero que la labraba y por último la de colocación, se marcaban los asientos y contra asientos y las piedras con molduras. La función de la marca de cantero era simplemente para poder contabilizar y cobrar sus piedras una vez terminadas.

 
Gran Maestre de Rodas (siglo XIV) recibiendo a los maestros de obra / Curioso, usan asiento
La jornada de trabajo duraba siempre de sol a sol siendo en verano de 12 horas y en invierno de 8 horas, el domingo era día de descanso, asimismo los días de fiesta. Se pagaba por días o semanas, o por cantidad de trabajo realizado y por supuesto si caía enfermo o tenía un accidente, no cobraba, aúnque la logia aportaba una manutención mínima hasta que se reponía.
En Europa, la construcción se detenía en invierno, ya que debido a las nieves y heladas, no se fraguaba bien el mortero. Las paredes a medio levantar se cubrían con paja y estiércol y se reemprendía el trabajo en primavera. El cantero tallista podía seguir trabajando esculturas y detalles a cubierto en la logia. El resto de los canteros compaginaban trabajos en el campo.
En Francia, entre 1050 y 1350, se construyeron ochenta catedrales, quinientas grandes iglesias e innumerables parroquias las cuales algunas de ellas tardaban en construirse más de cien años.
Canteros medievales
http://www.catedralesgoticas.es/eni_canteros.php

 
Maestre Anton Pilgram St. Stephen’s Cathedral, Vienna 1513 / El Maestro Mateo (c. 1150 – c. 1200 o c. 1217) Catedral de Santiago de Compostela.


Sepulcro de Doña Sancha (basílica colegiata de San Isidoro de León) / Cantero

 
Herramientas de canteros España
 
Los masones
La masonería comprende tres periodos convencionales: la masonería operativa que abarca los siglos XIII a XVI, la masonería de los aceptados, que abarca el siglo XVII y la masonería especulativa, que comprende desde el siglo XVIII (1717) hasta nuestros días.
Por un lado nos encontramos con la masonería operativa o de oficio, gremio de canteros que, sobre todo, construían catedrales góticas. Se trataba de un gremio muy cerrado, por los conocimientos que manejaba sobre el levantamiento de catedrales y por los códigos de comunicación que empleaban sus miembros. Con el devenir de los tiempos, estas construcciones góticas proporcionaron algún tipo de conocimiento iniciativo.


Símbolo de masones operativos / Enrique III acompañando al maestro de obras siglo XIV

Cuando las logias operativas empezaron a perder fuerza y poder, como es evidente por la disminución de trabajo y para poder sustentarse, empezaron a permitir el ingreso en las mismas a personas que no tenían ningún conocimiento de la construcción: miembros de la realeza, de la nobleza, de la banca, de las profesiones libres y del comercio. Esta etapa se le llamó de los masones aceptados, Las logias de este tipo se convirtieron en un espacio de librepensamiento y especulación filosófica. Si se trata de una transformación radical o progresiva, es algo que los historiadores se cuestionan hoy en día. En cualquier caso, al menos en Escocia, el vínculo orgánico entre la antigua masonería y la nueva parece incontestable. Las logias «no operativas» se hacen cada vez más numerosas en Escocia, Inglaterra e Irlanda.

Fuente: http://viajes.elpais.com.uy/2014/03/06/catedrales-masones-y-signos-lapidarios/

martes, 12 de mayo de 2015

HISTORIA DEL JUEGO DEL AJEDREZ


Mucho se ha hablado sobre este tema, pero en verdad lo único que puede afirmarse con propiedad es que el ajedrez es tan antiguo como la civilización, ya que en excavaciones efectuadas en la Mesopotamia (región ubicada entre los ríos Tigres y Eufrates) se han encontrado objetos que demostraban que el ajedrez o un juego similar existía por lo menos 4000 años antes de Cristo.

Duncan Forbes en su libro "Historia del Ajedrez" (Londres 1860) señala que el ajedrez tiene su origen en la India, más concretamente en el Valle del Indo, y data del siglo VI D.C. y a SUSA BEN DAHIR el HINDI como su inventor de acuerdo con el siguiente relato:

Estaba enfermo cierto rey de la India y la obsesión de su enfermedad se había apoderado de él. Le prescribieron que tratara de olvidar esa idea por medio de una distracción agradable. Fue con este motivo que SUSA BEN DAHIR elaboró o inventó el ajedrez.

Se lo presentó al rey y éste se puso muy contento y olvidó sus penas; luego de elogiarle la invención le dijo que pidiera lo que quisiera como recompensa. SUSA pidió que se le diera una moneda de oro por la primera casilla del tablero y que se fuera luego doblando el número por cada una de las casillas restantes en progresión geométrica.

Esto, al rey que por lo visto no era muy experto en matemáticas le pareció bien y ordenó que se le diera lo solicitado.

Pero a poco de hacer las cuentas vieron que era imposible de cumplir, pues no le alcanzaría ni con todos los tesoros de esta tierra, pues da una cantidad de 18.446.744.073.709.551.615.

Originalmente fue conocido como Chaturanga, que significa entre cuatro, ya que con ello se aludía a las cuatro armas del ejército indio: caballos, carros, elefantes e infantería (al pasar a occidente se transformaron en torres, caballos, alfiles u obispos y peones). Se difundió rápidamente por las rutas comerciales, llegó a Persia, y desde allí al Imperio bizantino, extendiéndose posteriormente por toda Asia.

El mundo árabe, adoptó el ajedrez con un entusiasmo sin igual: estudiaron y analizaron en profundidad los mecanismos del juego, escribieron numerosos tratados sobre ajedrez y desarrollaron el sistema de notación algebraica.

El juego llegó a Europa entre los años 700 y 900, a través de la conquista de España por el Islam, aunque también lo practicaban los vikingos y los Cruzados que regresaban de Tierra Santa. En las excavaciones de una sepultura vikinga hallada en la costa sur de Bretaña se encontró un juego de ajedrez, y en la región francesa de los Visigodos se descubrieron unas piezas del siglo X, de origen escandinavo, que respondían al modelo árabe tradicional.

Durante la edad media España e Italia eran los países donde más se practicaba.

Lo introdujeron con el nombre de "Shatrany" que dio origen luego al español "acedrex" y posteriormente Ajedrez. Los persas transformaron el término hindú rajah", que significa rey en "shah", y de allí proviene la frase árabe "shah mat" que significa el rey ha muerto, de la cual deriva la actual "jaque mate".

Se jugaba de acuerdo con las normas árabes (descritas en diversos tratados de los que fue traductor y adaptador Alfonso X el Sabio), según las cuales la reina y el alfil son piezas relativamente débiles, que sólo pueden avanzar de casilla en casilla. Durante los siglos XVI y XVII el ajedrez experimentó un importante cambio, y la reina se convirtió en la pieza más poderosa, en cuanto a su movimiento se refiere, del tablero. Fue entonces cuando se permitió a los peones avanzar dos casillas en su primer movimiento y se introdujeron la regla conocida como en passant ("al paso"),  que permite capturar el peón que sigue su marcha y no come la pieza que se le ha ofrecido por una determinada estrategia, y el revolucionario concepto del enroque.

Los jugadores italianos comenzaron a dominar el juego, arrebatándoles la supremacía a los españoles. Los italianos, a su vez, fueron desbancados por los franceses y los ingleses durante los siglos XVIII y XIX cuando el ajedrez, que había sido hasta entonces el juego predilecto de la nobleza y la aristocracia, pasó a los cafés y las universidades. El nivel del juego mejoró entonces de manera notable. Comenzaron a organizarse partidas y torneos con mayor frecuencia, y los jugadores más destacados crearon sus propias escuelas.

Las piezas del ajedrez se han fabricado con materiales muy diversos a lo largo de los siglos, y pueden ser figurativas o abstractas. La madera, la piedra, el marfil, el hueso, la plata, el oro, el bronce, el alabastro, el cristal, el ónix o la porcelana son algunos de los materiales empleados por los maestros artesanos para elaborar sus juegos de ajedrez, de belleza y valor incomparables. El ajedrez moderno es generalmente de madera o plástico, y responde al modelo conocido como Staunton, diseñado en Gran Bretaña en el siglo XIX. El ajedrez es un juego tan popular que se fabrican juegos de bolsillo para jugar durante los viajes. A finales de la década de 1970 las modernas tecnologías hicieron realidad el ajedrez electrónico, que permite a los jugadores enfrentarse con una máquina.

Las reglas con las que se practica el juego en la actualidad y el modelo de las piezas (diseñado por el jugador inglés Howard Staunton) data aproximadamente de 150 años y el primer torneo internacional se celebró en Londres en 1851 y a partir de allí se ha popularizado a escala universal.

Fuente: http://www.todoajedrez.com.ar/historia.php


jueves, 7 de mayo de 2015

¿SABEN DE QUÉ LES VOY A HABLAR?


Esta historia comienza cuando Nasrudin llega a un pequeño pueblo en algún lugar lejano de Medio Oriente.

Era la primera vez que estaba en ese pueblo y una multitud se había reunido en un auditorio para escucharlo. Nasrudin, que en verdad no sabia que decir, porque él sabía que nada sabía, se propuso improvisar algo y así intentar salir del atolladero en el que se encontraba.

Entró muy seguro y se paró frente a la gente. Abrió las manos y dijo:

-Supongo que si ustedes están aquí, ya sabrán que es lo que yo tengo para decirles.

La gente dijo:

-No... ¿Qué es lo que tienes para decirnos? No lo sabemos ¡Háblanos! ¡Queremos escucharte!

Nasrudin contestó:

-Si ustedes vinieron hasta aquí sin saber que es lo que yo vengo a decirles, entonces no están preparados para escucharlo.

Dicho esto, se levantó y se fue.

La gente se quedó sorprendida. Todos habían venido esa mañana para escucharlo y el hombre se iba simplemente diciéndoles eso. Habría sido un fracaso total si no fuera porque uno de los presentes -nunca falta uno- mientras Nasrudin se alejaba, dijo en voz alta:

-¡Qué inteligente!

Y como siempre sucede, cuando uno no entiende nada y otro dice "¡qué inteligente!", para no sentirse un idiota uno repite: "¡si, claro, qué inteligente!". Y entonces, todos empezaron a repetir:

-Qué inteligente.
-Qué inteligente.

Hasta que uno añadió:

-Si, qué inteligente, pero... qué breve.

Y otro agrego:

-Tiene la brevedad y la síntesis de los sabios. Porque tiene razón. ¿Cómo nosotros vamos a venir acá sin siquiera saber qué venimos a escuchar? Qué estúpidos que hemos sido. Hemos perdido una oportunidad maravillosa. Qué iluminación, qué sabiduría. Vamos a pedirle a este hombre que dé una segunda conferencia.

Entonces fueron a ver a Nasrudin. La gente había quedado tan asombrada con lo que había pasado en la primera reunión, que algunos habían empezado a decir que el conocimiento de Él era demasiado para reunirlo en una sola conferencia.

Nasrudin dijo:

-No, es justo al revés, están equivocados. Mi conocimiento apenas alcanza para una conferencia. Jamás podría dar dos.

La gente dijo:

-¡Qué humilde!

Y cuanto más Nasrudin insistía en que no tenia nada para decir, con mayor razón la gente insistía en que querían escucharlo una vez más. Finalmente, después de mucho empeño, Nasrudin accedió a dar una segunda conferencia.

Al día siguiente, el supuesto iluminado regresó al lugar de reunión, donde había más gente aún, pues todos sabían del éxito de la conferencia anterior. Nasrudin se paró frente al público e insistió con su técnica:

-Supongo que ustedes ya sabrán que he venido a decirles.

La gente estaba avisada para cuidarse de no ofender al maestro con la infantil respuesta de la anterior conferencia; así que todos dijeron:

-Si, claro, por supuesto lo sabemos. Por eso hemos venido.

Nasrudin bajó la cabeza y entonces añadió:

-Bueno, si todos ya saben qué es lo que vengo a decirles, yo no veo la necesidad de repetir.

Se levantó y se volvió a ir.

La gente se quedó estupefacta; porque aunque ahora habían dicho otra cosa, el resultado había sido exactamente el mismo. Hasta que alguien, otro alguien, gritó:

-¡Brillante!

Y cuando todos oyeron que alguien había dicho "¡brillante!", el resto comenzó a decir:

-¡Si, claro, este es el complemento de la sabiduría de la conferencia de ayer!

-Qué maravilloso
-Qué espectacular
-Qué sensacional, qué bárbaro

Hasta que alguien dijo:

-Si, pero... mucha brevedad.
-Es cierto- se quejó otro
-Capacidad de síntesis- justificó un tercero.

Y en seguida se oyó:

-Queremos más, queremos escucharlo más. ¡Queremos que este hombre nos de más de su sabiduría!

Entonces, una delegación de los notables fue a ver a Nasrudin para pedirle que diera una tercera y definitiva conferencia. Nasrudin dijo que no, que de ninguna manera; que él no tenia conocimientos para dar tres conferencias y que, además, ya tenia que regresar a su ciudad de origen.

La gente le imploró, le suplicó, le pidió una y otra vez; por sus ancestros, por su progenie, por todos los santos, por lo que fuera. Aquella persistencia lo persuadió y, finalmente, Nasrudin aceptó temblando dar la tercera y definitiva conferencia.

Por tercera vez se paró frente al publico, que ya eran multitudes, y les dijo:

-Supongo que ustedes ya sabrán de qué les voy a hablar.

Esta vez, la gente se había puesto de acuerdo: sólo el intendente del poblado contestaría. El hombre de primera fila dijo:

-Algunos si y otros no.

En ese momento, un largo silencio estremeció al auditorio. Todos, incluso los jóvenes, siguieron a Nasrudin con la mirada.

Entonces el maestro respondió:

-En ese caso, los que saben... cuéntenles a los que no saben.


Se levantó y se fue.